sábado, 28 de mayo de 2016

LA DIVINA MISERICORDIA EN MI ALMA (Extractos)

De Santa María Faustina Kowalska, religiosa polaca. Muere en 1938 a los 33 años. Canonizada por S.Juan Pablo II.

Resumen frases de su libro
Entrega Nº 8 (37 en total)

Se harán tres entregas mensuales: los días 8, 18 y 28 de cada mes en esta capilla  adoracionperpetua.bilbao@gmail.com (para más copias, pedir a esta dirección)

N. 374: Desde hoy no existe mi propia voluntad. Desde hoy cumplo la voluntad de Dios, en todas partes, siempre, en todo.

N. 377: En cada examen de conciencia suscitar en mí la contrición perfecta y, especialmente, antes de ir a descansar.

N. 378: Nadie puede negar que Dios es infinitamente misericordioso; Él desea que todos lo sepan; antes de volver como Juez, desea que las almas lo conozcan como Rey de Misericordia.

N. 378: Que proclamen esta gran misericordia Mía. Yo mismo los defenderé en la hora de la muerte como Mi gloria aunque los pecados de las almas sean negros como la noche; cuando un pecador se dirige a Mi misericordia, Me rinde la mayor gloria.

N. 379: Con las almas que recurran a Mi misericordia y con las almas que glorifiquen y proclamen Mi gran misericordia a los demás, en la hora de la muerte Me comportaré según Mi infinita misericordia.

N. 380: No hago ningún movimiento, ningún gesto a mi gusto, porque estoy vinculada a la gracia; siempre estoy atenta a lo que es más agradable a Jesús.

N. 381: Sí, cuando eres obediente, te quito tu debilidad y te doy Mi fortaleza. Me sorprende mucho que las almas no quieran hacer este cambio Conmigo.

N. 388: “Acuérdate de mí cuando estés en el paraíso” El arrepentimiento sincero transforma inmediatamente a un alma.

N. 392: El amor no consiste en las palabras ni en los sentimientos, sino en la acción.

N. 394: Cuando recibí la Santa Comunión, mi alma fue inundada de un gozo tan grande que no logro describirlo.

N. 400: ¡Oh, elegida Mía!, te colmaré con gracias aún mayores para que seas testigo de Mi infinita misericordia por toda la eternidad.

N. 401: Escuché a todos sus quejas y advertí que no había corazones alegres, porque no había corazones que amaran sinceramente a Dios.

N. 407: No dejaba de alegrarme del silencio y de la calma gracias a las cuales el alma se sumerge en Dios tan fácilmente.

N. 408: Le escupían en la Cara y otros tomaban la caña y le pegaban en la Cabeza; otros le producían dolor a puñetazos, y otros le taparon la Cara y le golpeaban con los puños. Jesús lo soportaba silenciosamente.

N. 408: Yo pensaba ¿de dónde podía proceder tanta maldad en el hombre? La provoca el pecado. Se encontraron el Amor y el pecado.

N. 409: ¡Oh!, si todas las almas supieran quién vive en nuestros templos, no habría tantos insultos y tantas faltas de respeto en aquellos lugares santos.

N. 411: En los momentos cuando me encuentro con Dios en la profundidad de mis entrañas, me siento tan feliz que no sé expresarlo. Siento que estoy unida a Dios tan estrechamente como una gota de agua en el océano sin fondo.

N. 412: Satanás sacudió mi cama. Me desperté inmediatamente y comencé a rezar con calma a mi Ángel Custodio. De súbito, vi las almas que estaban expiando en el purgatorio; su aspecto era como una sombra y entre ellas vi muchos demonios.

N. 414: Deseo que esta imagen sea venerada en público. Luego vi al Señor Jesús que agonizaba en la cruz entre terribles tormentos y del Corazón de Jesús salieron estos dos rayos que están en la imagen.

N. 423: Todo pasará pero su misericordia no tiene límites ni fin. Cuanto más grande es el pecador, tanto mayor es el derecho que tiene a la Divina Misericordia.

N. 424: La verdadera grandeza está en amar a Dios y en la humildad.

N. 426: ¡Oh!, hora terrible (separación cuerpo y alma) en la que se nos presentarán todas nuestras obras en su completa desnudez y miseria; ni una de ellas se pierde, nos acompañarán fielmente hasta el juicio de Dios.

N. 436: El secreto era éste: que Dios exigía que hubiera una Congregación que proclamara la Divina Misericordia y la implorase para el mundo.

N. 441: A través de ti, como a través de esta Hostia, los rayos de la misericordia pasarán al mundo.

martes, 10 de mayo de 2016

La Divina Misericordia en mi alma (Extractos)

De Santa María Faustina Kowalska, Religiosa polaca. Muere en 1938 a los 33 años. Canonizada por san Juan Pablo II.
Resumen frases de su libro
Entrega Nº 7 (37 en total)
(Se harán tres entregas mensuales: los días 8, 18 y 28 de cada mes en esta capilla adoracionperpetua.bilbao@gmail.com (para más copias, pedir a esta dirección)

N. 314: En cierta ocasión, cuando por la tarde fui a la huerta, el Ángel Custodio me dijo: Ruega por los agonizantes.

N. 318: Aun cuando realizo los más importantes asuntos que requieren atención, no pierdo la presencia de Dios en el alma y quedo estrechamente unido a Él. Con Él voy al trabajo, al recreo, sufro, gozo, vivo en Él y Él en mí. No estoy nunca sola.

N. 320: Jesús me enseñó cuánto le agrada la plegaria reparadora; me dijo: La plegaria de un alma humilde y amante aplaca la ira de mi Padre y atrae un mar de bendiciones.

N. 324: Hay un solo precio con el cual se compran las almas, y éste es el sufrimiento unido a Mi sufrimiento en la cruz.

N. 325: Es posible orar interiormente sin cesar.

N. 330: (La Virgen): Yo soy no sólo la Reina del Cielo, sino también la Madre de la Misericordia y tu Madre.

N. 331: ¡Oh!, qué grande es la gracia de tener al director espiritual. Se progresa más rápidamente en las virtudes, se conoce más claramente la voluntad de Dios, se la cumple más fielmente, se avanza en un camino cierto y seguro.

N. 331: Queramos o no queramos, debemos cumplir la voluntad de Dios y me dio el ejemplo del profeta Jonás.

N. 333: En la práctica la infancia del espíritu debe manifestarse así: El niño no se ocupa del pasado ni del futuro sino que aprovecha el momento presente.
N. 337: Dios está celoso de nuestros corazones y quiere que lo amemos exclusivamente a Él.

N. 340: Veo que las cosas más pequeñas, cumplidas por un alma que ama sinceramente a Dios, tienen un valor inestimable en los ojos de sus santos.

N. 341: Quiero que la imagen se la venere públicamente para que cada alma pueda saber de ella.

N. 342: El sufrimiento es el tesoro más grande que hay en la tierra, purifica al alma. El amor verdadero se mide con el termómetro del sufrimiento.

N. 350: El celo por la salvación de las almas debería arder en nuestros corazones.

N. 351: El pasado no me pertenece, el futuro no es mío, el tiempo presente trato de aprovecharlo con toda el alma.

N. 357: Cuanto más grandes son las tinieblas tanto más plena debe ser nuestra confianza en el Corazón Divino.

N. 358: No comprendo cómo es posible no tener confianza en Aquel que lo puede todo; con Él todo y sin Él nada. El Señor no permitirá ni dejará que queden confundidos aquellos que han puesto en Él toda su confianza.

N. 359: Si las almas quisieran escuchar al menos un poco la voz de la conciencia, es decir la inspiración del Espíritu Santo…. al menos un poco ya que si una vez nos dejamos influir por el Espíritu de Dios, Él mismo completará lo que nos falte.

N. 360: A Jesús le agrada participar en los más pequeños detalles de nuestra vida.

N. 365: Has de saber que cuando aniquilas en ti tu propia voluntad, entonces la Mía reina en ti.

N. 367: ¡Oh!, qué grande es la indiferencia de las almas por tantas pruebas de amor, Mi Corazón está recompensado con ingratitud, con olvido por parte de las almas que viven en el mundo. Tienen tiempo para todo pero no para venir a tomar Mis gracias.

N. 367: Hay almas que viven en el mundo, que Me quieren sinceramente, en sus corazones permanezco con delicia, pero son pocas. También en los conventos hay almas que llenan de alegría Mi Corazón.

N. 367: Su número es muy pequeño. El amor y el sacrificio de estas almas sostienen la existencia del mundo. Lo que más dolorosamente hiere Mi Corazón son las infidelidades del alma elegida por Mí: son como espadas que traspasan Mi Corazón.

N. 369: Una hora de meditación de Mi dolorosa Pasión tiene mayor mérito que un año entero de flagelaciones a sangre.

N. 373: Siento claramente que en mi corazón está solamente Él, únicamente Jesús Mismo. Amo a todos los hombres porque veo en ellos la imagen de Dios.

martes, 3 de mayo de 2016

LA DIVINA MISERICORDIA EN MI ALMA Extractos

De Santa María Faustina kowalska, religiosa polaca. Muere en 1938 a los 33 años. Canonizada por S.Juan Pablo II.

Resumen frases de su libro

Entrega Nº 6 (37 en total)

(Se harán tres entregas mensuales: los días 8, 18 y 28 de cada mes en esta capilla) adoracionperpetua.bilbao@gmail.com (para más copias, pedir a esta dirección)
N. 270: Sin humildad no podemos agradar a Dios. Ejercítate en el tercer grado de la humildad, es decir no solamente no recurras a explicaciones y justificaciones cuando te reprochen algo, sino que alégrate de la humillación.

N. 270: Las verdaderas obras de Dios siempre enfrentan dificultades y se caracterizan por el sufrimiento. Si Dios quiere realizar algo, tarde o temprano lo realizará, lo realizará a pesar de las dificultades y tú, mientras tanto, ármate de gran paciencia.

N. 273: Te ruego con todo mi corazón, permíteme conocer lo que no Te agrada en mí y al mismo tiempo darme a conocer lo que tengo que hacer para agradarte más.

N. 274: Jesús me concedió el conocimiento de mí misma. En esta luz de Dios veo mi defecto principal, es la soberbia, su característica el cerrarme en mi misma, la falta de sencillez en las relaciones con la Madre Superiora.

N. 274: Para un asunto que podría ser resuelto con dos palabras, empleo demasiado tiempo. Jesús desea que lo emplee para pequeñas plegarias con indulgencias para las almas del Purgatorio. Me dice el Señor que cada palabra será pesada el Día del juicio.

N. 274: No es asunto mío ver cómo se comportan los demás, con tal de que yo me comporte como Dios desea. Jesús ama a las almas escondidas.

N. 276: Desde el momento en que empecé a amar el sufrimiento, este mismo dejó de ser sufrimiento para mí. El sufrimiento es el alimento continuo de mi alma.

N. 279: El verdadero amor de Dios consiste en cumplir Su voluntad. Para demostrar a Dios el amor en la práctica, es necesario que todas nuestras acciones, aún las más pequeñas, deriven del amor hacia Dios.
N. 279: Cuanto más ames el sufrimiento, tanto más puro será tu amor hacia Mí.

N. 281: Siento bien que mi misión no terminará con mi muerte, sino empezará. ¡Oh, almas!, les descorreré las cortinas del cielo para convencerlas de la bondad de Dios.
N. 283: De nosotros depende solamente no oponernos a la actuación de Dios.

N. 284: Cuando miro un alma consagrada que es tibia, entonces mi corazón sangra.

N. 289: Los momentos más felices para mí son aquellos cuando me quedo a solas con mi Señor. En aquellos momentos conozco la grandeza de Dios y mi propia miseria.

N. 291: Dios es muy generoso y no rehúsa a nadie su gracia , da más de lo que nosotros le pedimos. La fidelidad en el cumplimiento de las inspiraciones del Espíritu Santo es el camino más corto.

N. 292: Cuando un alma ama sinceramente a Dios, no debe temer nada en su vida espiritual.

N. 294: Invita a las almas con las cuales estás en contacto a confiar en Mi misericordia infinita. ¡Oh!, cuánto amo a las almas que se Me han confiado totalmente, haré todo por ellas.

N. 295: No cuentes con ninguna criatura ni siquiera en la cosa más pequeña, ya que esto no Me agrada. Yo quiero estar en tu alma solo. Fortificaré tu alma y te daré luz.

N. 296: Deseo adorarte con cada momento de mi vida y unir estrechamente mi voluntad a Tu santa voluntad.

N. 296: Es una gran cosa saber aprovechar el momento presente.

N. 299: Los dos rayos significan la Sangre y el Agua. El rayo pálido simboliza el Agua que justifica a las almas. El rayo rojo simboliza la Sangre que es la vida de las almas.

N. 300: La humanidad no conseguirá la paz hasta que no se dirija con confianza a Mi misericordia.

N. 300: ¡Oh!, cuánto me hiere la desconfianza del alma. Esta alma reconoce que soy santo y justo, y no cree que Yo soy la misericordia, no confía en mi bondad. También los demonios admiran Mi justicia, pero no creen en Mi bondad.

N. 302: Con la gracia de Dios he recibido ahora esta disposición del corazón, de que nunca estoy tan feliz como cuando sufro por Jesús, al que amo con cada latido.

N. 304: ¡Oh!, qué grande es el fuego del amor purísimo que arde en Tu Sacratísimo Corazón. Feliz el alma que ha entendido el amor del Corazón de Jesús.
N. 305: Mi mayor deseo es que las almas Te conozcan, que sepan que eres su eterna felicidad, que crean en Tu bondad y que alaben Tu infinita misericordia.

domingo, 1 de mayo de 2016

¡Padre mío! ¿Porque me has abandonado?




Cristo en la cruz experimento, como nosotros la oscuridad. ¡La muerte! Él comprende nuestros sufrimientos y nos anima. La cruz no es el final sino el camino para la Resurrección y la vida eterna.
¡ÁNIMO! Aunque ahora no comprendas, tu sufrimiento no es un absurdo y, como el de Cristo, sera fuente de bien para tí y para tus prójimos.