Hace algunos años leí en la prensa que el
gobierno autorizaba el desmantelamiento de las líneas Calatayud-Valencia y Calatayud-Cidad Dosante.
Estas líneas definían el eje ferroviario
denominado Santander-Mediterráneo que jamás llego a completarse.
El escaso trafico de este eje hizo que en 1985
el gobierno decidiera suspender el servicio; sin embargo la infraestructura
debía conservarse e incluso cuidarse (cosa que jamás se hizo) debido a su
carácter de línea estratégica desde el punto de vista militar. Como se puede
imaginar, este carácter estratégico ya dejo de contar.
De hecho, desde hace años la circulación por
este eje era imposible, pues para facilitar la construcción de otras
infraestructuras se hicieron desmantelamientos parciales. No obstante, siempre
se ha dejado la reserva de suelo para una hipotética reutilización.
Se han hecho muchos estudios sobre su
reapertura e incluso se ha pensado en utilizar la infraestructura para un enlace
de alta velocidad entre Soria y Calatayud.
Al final lo ocurrido ha sido un paso atrás en
el tiempo, lo que años atrás fue un camino de hierro símbolo del progreso, hoy
pasa a ser sendero. De hecho, hoy por hoy, parece que la única utilidad que le
quede sea ser Vía Verde.