jueves, 14 de enero de 2010

DIOS HIZO UNA HISTORIA POR AMOR A TI


En el año 2000, con motivo de la visita de Juan Pablo II a Tierra Santa, se organizo por el Camino Neocatecumenal una peregrinación en la cual participe.
En el momento de visitar el Muro de las Lamentaciones me emocione. El motivo fue que me vino a la mente la siguiente reflexión: -"Esto no es ajeno a mi vida. Cuando Dios inspiro su construcción ya estaba pensando en mí. ¡Esto era por mí! Ese templo formaba parte de una historia de salvación dirigida a toda la humanidad."
 En conclusión, me sentí muy amado por Dios, y no pare de rezar diciendo: "Bendito seas Señor por esta historia, de la cual estas piedras son testigo y que hiciste por amor a mí y a todos los hombres." Esta historia que Dios hace para venir a nuestro encuentro es algo concreto. No solo esas piedras; también en el evangelio, encontramos referencias tales como: -En el año tal, reinando tal, siendo gobernador cual. En tal lugar... Estos datos, los cuales a veces no creemos importantes, nos hacen ver que Dios no es algo mítico, fuera del tiempo, si no que acontece en un momento concreto. En mi vida y en la de tantos también ha sido así. En un momento concreto, en unas circunstancias bien concretas tuvimos un encuentro con Dios. Este encuentro no es para unos elegidos. ¡Es para todos! Pero como dice el evangelio de Juan:" Vino a los suyos pero, los suyos no le recibieron." Despierta pues, y anhela encontrar a un Dios que te ama y que no es ajeno a tus problemas. Seguro que si le abres la puerta, Él vendrá.

POR UNA COALICION DE PARTIDOS CATOLICOS

En lo tocante a la coherencia con los principios católicos
observamos la existencia de diferentes posturas:
-En primer lugar tenemos el Partido Popular; en este vemos
que aunque hay miembros que se identifican con los valores
católicos, al final el partido opta mas por un punto
intermedio. Por tanto podemos concluir que aunque pondere
los valores católicos no siempre va en coherencia con ellos.
Para muestra tenemos el tema del aborto, donde su postura
 no es su total condena, si no que mas bien, permite una
 cierta tolerancia; ya que si no en el momento de tener
mayoría absoluta hubiera abolido la ley del aborto vigente.
-Por otra parte existen varios partidos minoritarios, los
cuales en su ideario consideran los principios católicos
como no negociables. Al margen de estos principios su
inclinación ideológica es difiere entre ellos.
 Mi valoración como católico es en primer lugar considerar
que el PP no es mi partido idóneo, pues no siempre sigue
los valores católicos.
Del resto de partidos, estoy de acuerdo en lo
fundamental,  pero fuera de esto solo optaría por uno. Ya que
tengo mi visión y por el solo hecho de que un partido diga
que es católico, no necesariamente he de comulgar con él.
Realmente con un montón de partidos minúsculos no se va a
ningún lado.
Mi propuesta es que si en lo fundamental estamos de
acuerdo,  porque no hacer una coalición de partidos
católicos.
El resto de matices ideológicos se pueden negociar después.
Pero si uniéramos votos, puede que el voto católico tuviera
más fuerza.
Esto influiría incluso en el PP, pues si quisiera contar con
Apoyos, tendría que valorar este voto y la postura católica
mas de lo que hace hoy, pues mas bien, parece que los católicos
son su voto cautivo por no tener mejor alternativa  y por
 tanto un cheque en blanco para el PP.

domingo, 27 de diciembre de 2009

EL ANHELO DE ENCONTRARME CON DIOS


Benedicto XVI dice: "El cristianismo
no es una religión; es un encuentro."
Esto es lo que yo anhelo cada día: Encontrarme con Dios y
experimentar que Él es mi padre, que mi vida no es un azar, que
yo como todo hombre soy importante para Él.
En el cristianismo, hablamos mucho de salvarnos y nos
esforzamos en cumplir los mandamientos para lograr esta
salvación.
En sí, esto no es malo, pues los mandamientos son vida.
Son como las señales de tráfico, que si no se respetan, con toda
seguridad, se sufrirán accidentes, incluso mortales.
Incluso si somos buenos cumplidores, podemos quedarnos en la
vanidad y tener ahí nuestra paga.
El cristianismo es más que eso. Es tener un encuentro con
Dios y experimentar que Dios está contigo. ¿Cómo se hace
esto? El Espíritu Santo nos ayuda a verlo.
Para entenderlo como se concreta, lo mejor es conocer
historias de conversión, tanto de santos, como de hombres de
hoy. Ahí tendremos ejemplos concretos.
Ahora, ¿Tu, quieres tener tu encuentro con Dios?

 El simple deseo de tenerlo ya es un buen principio, ahora di
como el ciego del evangelio :"¡Jesús, hijo de David, ten
compasión de mi que soy un pecador!". O Bien:"¡Señor ayúdame a ver!
Quizá Dios te sorprenda y tu vida cambie y además cumplas
encantado los mandamientos de Dios
¡Animo!

jueves, 24 de diciembre de 2009

UN MENOR NO ES UN PERRO


Antes que nada, dejar sentado que no soy experto en estas cuestiones, pero quiero dejar constancia de la inquietud que me provoco la lectura de una reseña en un diario regional. Sin abundar en detalles, la reseña hablaba de la condena de un menor, el cual había asesinado a otro menor.
 Aparte de la pena aplicada a este menor, a sus padres como sus responsables civiles se les condena a indemnizar a la víctima, procediéndose para ello al embargo de sus bienes.
Estos bienes son: vivienda familiar, sueldo del padre y prestación por desempleo de la madre. Haciendo constar,  una vez más, mi desconocimiento de estos temas, paso a exponer mi inquietud.
En principio me parece desproporcionado lo que les cae a los padres. Podría ser el caso que en su vida hubiesen roto un plato, pero han de pagar por lo que hizo un hijo, casi seguro que sin su aprobación.
Este proceder creo que hace un flaco favor a la sociedad, pues desmotivara a muchos de tener hijos, puesto que un padre no se ve apoyado en su patria potestad. Esta, más bien sirve para cargarle a Él todo el peso de la responsabilidad, como si la sociedad no tuviera nada que ver en ello.
En caso de un menor de tres años, por poner un ejemplo, podemos entenderlo.
Imaginemos un adolescente de 15. No le podemos tener esposado u maniatado como si fuera un perro para evitar que salga por ahí y haga cualquier cosa. En ese caso el padre pagaría las consecuencias, aunque lo que hubiera hecho el menor fuera contrario a su voluntad.
En conclusión creo pues que proporcionalmente a su edad, este menor, como persona consciente que es, debería ser él principalmente el sujeto del castigo.
Y no deshacer la vida a unos padres que posiblemente sean los primeros que no aprueben esa actitud de su hijo.
 Sin embargo ¿Que pueden hacer?