viernes, 15 de febrero de 2019

EL PAPEL DEL JUDAÍSMO EN LA HUMANIDAD IV

3º El pacto del Sinaí (Libros Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio.)

El pacto que definió el papel de Israel en el mundo

Tal como fue profetizado a Abraham, y según nos narran los últimos capítulos del libro del Génesis, debido a una hambruna generalizada, los doce hermanos, hijos de Jacob, emigraran a Egipto donde la buena gestión de su hermano José que ha sido nombrado primer ministro hace que sea posible encontrar grano.
En atención a José, los israelitas fueron bien tratados convirtiéndose en un pueblo numeroso.
Al desaparecer José y llegar un nuevo faraón que desconocía los favores que José hizo a Egipto, viendo que los Israelitas cada vez eran más numerosos y temiendo por ello, decidió oprimirlos, esclavizarlos y mermarlos.
Dios se compadece de su pueblo y elige a Moisés, exiliado en Madian. Le pide que vaya al Faraón y le de permiso para que Israel salga de Egipto. Frente a la negativa del Faraón; Dios enviará las diez plagas que harán que el Faraón ceda. Al salir Israel al desierto, los egipcios los persiguen. Dios permitirá que los Israelitas crucen el mar que se abre ante ellos, pero que se cerrara sobre los egipcios pereciendo estos.
Una vez libres en el desierto, Dios hará el pacto definitivo con Israel en el monte Sinaí.
Los puntos más importantes de este pacto están contenidos en lo que se ha denominado tablas de la ley, tambien conocidos como los Diez Mandamientos y que son:


El Decálogo *.
20 1 Dios pronunció estas palabras: 2 «Yo soy Yahvé, tu Dios, que te he sacado del país de Egipto, del lugar de esclavitud.
3 No tendrás otros dioses fuera de mí*.
4 No te harás escultura ni imagen alguna de lo que hay arriba en los cielos, abajo en la tierra o en las aguas debajo de la tierra*.
5 No te postrarás ante ellas* ni les darás culto, porque yo, Yahvé, tu Dios, soy un Dios celoso, que castigo la iniquidad de los padres en los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me odian, 6 pero tengo misericordia de mil generaciones con los que me aman y guardan mis mandamientos.
7 No pronunciarás el nombre de Yahvé, tu Dios*, en falso; porque Yahvé no dejará sin castigo a quien pronuncie su nombre en falso.
8 Recuerda el día del sábado* para santificarlo. 9 Seis días trabajarás y harás todos tus trabajos, 10 pero el día séptimo es día de descanso en honor de Yahvé, tu Dios. No harás ningún trabajo, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu ganado, ni el forastero que habita en tu ciudad. 11 Pues en seis días hizo Yahvé el cielo y la tierra, el mar y todo cuanto contienen, y el séptimo descansó. Por eso bendijo Yahvé el día del sábado y lo santificó.
12 Honra a tu padre y a tu madre, para que se prolonguen tus días sobre la tierra que Yahvé, tu Dios, te va a dar.
13 No matarás.
14 No cometerás adulterio.
15 No robarás.
16 No darás testimonio falso contra tu prójimo.
17 No codiciarás la casa de tu prójimo, ni codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni nada que sea de tu prójimo.»

(Versión Biblia de Jerusalén)

Junto a estos, se dan más preceptos que vienen detallados en los libros del Levítico y del Deuteronomio y que regulan muchos de los aspectos de la vida del pueblo hebreo. Junto a estos, dicen los rabinos, que también existe una Torá oral transmitida por la tradición.
La tradición rabínica has sintetizado estas nomas en los 613 preceptos que debe cumplir todo judío.
Para resolver las dudas sobre cómo interpretar el modo de cumplir estos preceptos y para buscar el modo más perfecto se ha desarrollado un corpus parecido a lo que conocemos como jurisprudencia y recogido en libros como el Talmud.
Estas normas, al regular las costumbres, en muchos casos de modo bien diferente a la de los otros pueblos, han contribuido a forjar la personalidad de Israel que por ellas se hace diferente al resto de pueblos

Según se recoge en el mismo pacto, el cumplimiento de estos mandatos procurará la protección y el favor de Dios. Enseguida Israel vivirá la dificultad de vivir de acuerdo con esta alianza. Pero Dios promete por los profetas la venida de un mesías que restaurará a Israel y con él un tiempo donde Dios dará  el espíritu necesario para poder cumplir la ley. Dentro del detallismo rabínico existen las condiciones que debe cumplir el Mesías. Han existido personas que pensaban que eran ellos los designados aunque han sido desechados. Uno de ellos, Jesucristo, también rechazado por los judíos tiene la peculiaridad de ser reconocido como Mesías, y aun mas, como hijo de Dios, algo inconcebible para una mente judía. Sin embargo Jesucristo ha llevado a la fe en un solo Dios, personal y que se preocupa de los hombres a una gran parte de la humanidad.

Tras haber descrito los tres pactos, tenemos ya el marco adecuado para desarrollar en la siguiente parte el papel del pueblo judío y poderlo comprenderlo bien. También la breve explicación sobre el Mesías nos ayudará
 a comprender como se ven judíos y cristianos, tanto ayer como hoy.

Cotinuará...