En los últimos años por diversos motivos, tales
como no ser rentables o el bajo número
de viajeros, se han clausurado un buen número de trazados ferroviarios. Estos
trazados pasan unas veces a ser vía verde, otras les queda como única esperanza
que un futuro plan de infraestructuras quiera reutilizarlos. En ocasiones
surgen propuestas de utilización por empresas privadas. Ante el triste estado
de abandono en que muchas veces se hayan sumidas este tipo de líneas, que en su
momento supusieron una gran inversión, deseo hacer esta propuesta: Que fuera
posible que en estos casos, estuviese abierta la posibilidad de arrendar estas líneas
a iniciativas privadas razonables. Nadie es mejor que nadie. Lo importante es
aprovechar lo bueno. Unas veces la mejor opción puede ser lo público, pero
también se puede dar el caso que donde lo público no supo seguir adelante, una
idea particular lo haga. No les cerremos la puerta.